Renuncia de Millennials
Los millennials… esa generación propositiva, actualizada y
llena de vida, pero a la vez, tan difícil de retener en un empleo. De acuerdo
con una encuesta realizada por Deloitte, las personas nacidas entre 1981 y 1995
conforman 35 por ciento de la fuerza laboral en el mundo y en 10 años
conformarán nada menos que el 75.
Estos jóvenes se caracterizan por ser cien por ciento
digitales –no imaginan su vida sin Smartphones ni apps–, consumidores
informados y exigentes, sociables y colaborativos, autosuficientes, innovadores
y creativos. Sí, todo eso en una sola persona. Pero estas mismas cualidades son
un arma de doble filo para las empresas: los millennials suelen entregarlo
todo, pero su compromiso muchas veces es fugaz. Suelen aburrirse pronto de la
rutina y buscan cambiar de aire para sentirse renovados.
Algunas de las compañías más innovadoras y exitosas del
mundo, como Google y Hootsuite, son impulsadas por las ideas y el trabajo de
millennials. ¿Cómo han conseguido enamorarlos para que se sientan comprometidos
a largo plazo?
Para responder esta pregunta, primero es preciso conocer
cuáles son las razones principales por las que los miembros de esta generación
abandonan un trabajo (sí, las empresas mismas tienen gran parte de la
responsabilidad).
Se sienten desmotivados por sus compañeros o jefes
Esa persona que pasa horas viendo videos hace mucho más que
ser improductiva: desmotiva enormemente al resto del equipo. Esto es todavía
peor si se trata de un líder. Un millennial difícilmente tolerará que algún
compañero o jefe suyo finja trabajar mientras los demás se rompen la espalda
haciéndolo. Este sentimiento de impotencia lo llevará a renunciar más temprano
que tarde. No sienten que hagan una diferencia.
Los millennials crecieron creyendo que podían cambiar el
mundo, y está en su ADN sentirse impulsados a generar un cambio. Por esta
razón, medir el rendimiento de los trabajadores con números o establecer
procedimientos estrictos es la forma más segura de hacerles sentir que su
libertad está coartada. Recuerda: un millennial es libre y propositivo por
naturaleza. Los trabajos mecánicos, repetitivos y poco relevantes los
frustrarán en cuestión de meses.
Se rodean por un ambiente laboral rígido
¿Una oficina plagada de juntas, procesos burocráticos y
caras largas? No, gracias. Los millennials necesitan sentirse rodeados por
“buena vibra”, prácticas motivadoras y un espacio que propicie las ideas
innovadoras. Sí, el café, las galletas y los comedores amplios se aprecian,
pero no son lo más importante. Un jefe flexible e inspirador, un equipo de
trabajo diverso y la menor cantidad de procesos burocráticos posible son las
condiciones para que el ambiente de trabajo sea agradable.
Reciben un trato poco humano
Para nadie es agradable sentirse como un empleado más que
sólo es relevante en la medida en que genera utilidades a una empresa. Pero,
para un millennial, esto es simplemente intolerable. Si los tratas así, ten por
seguro que tu empresa recibirá el mismo trato. ¿No quieres que su trabajo sea
nada más que el medio para pagar su renta? Reconoce sus logros, procura su
bienestar y busca siempre que se sientan cómodos.
Realizan un trabajo mecánico
¿Quieres contratar a un millennial para subir 10 notas al
día, sacar 100 copias o responder llamadas sin fin? Prepárate para perderlo en
cuestión de meses (o semanas). Los jóvenes de esta generación detestan los
trabajos mecánicos y rutinarios: odian sentirse como robots, por lo que
buscarán cualquier oportunidad para dejar ese empleo. Así de simple.
Sienten restringida su libertad
Como dijimos antes, los millennials se caracterizan por ser
autosuficientes y por dictar su propio camino. Si bien toda empresa debe tener
definidos sus procesos, también es importante que los jefes permitan que los
miembros de sus equipos enriquezcan el negocio con sus aportaciones. Una cosa
es segura: cumplir órdenes sin posibilidad de proponer no es el dream job de
ningún millennial.
La flexibilidad es nula
Horarios flexibles? ¿La posibilidad de trabajar desde casa?
¿La posibilidad de modificar procedimientos? Si estos conceptos te suenan
completamente ajenos, lo más probable es que exista una altísima rotación de
personal joven en tu empresa. No hay mejor forma de motivar a los millennials
que ofrecerles este tipo de facilidades.
No existe un equilibrio vida-empleo
Has escuchado que los millennials son sumamente trabajadores
y que son capaces de pasar noches enteras en vela con tal de que su trabajo sea
perfecto. Esto es cierto, pero no significa que no valoren su vida privada o
que su finalidad última sea pasar las 24 horas del día trabajando. Un empleo
que no vele por su bienestar personal será descartado.
Posibilidades de crecimiento: cero
¿Has escuchado el término "zona de confort"?
Bueno, pues no aplica a los millennials. Los millennials no son conformistas.
Todo lo contrario: aspiran a llegar lejos, por lo que quedarse en el mismo
puesto durante 10 años no forma parte de sus planes (¡ni pensarlo!). Tienen la
mirada puesta en el crecimiento profesional, por lo que si encuentran que su
empleo no les ofrece la posibilidad de aprender más, poner en práctica sus habilidades,
proponer proyectos y escalar de puesto, lo más probable es que se muevan de
lugar.
Una empresa sin valores
Estos jóvenes no son ajenos a la realidad social y ambiental
que los rodea; se preocupan, además de por su bienestar personal, por generar
un impacto positivo en su entorno. Por lo tanto, si trabajan en una empresa que
no lleva a cabo acciones de responsabilidad social o que no es coherente con
sus valores y prácticas, difícilmente se pondrán la camiseta.
Si eres dueño de un negocio, ¿consideras que los millennials
son indispensables para sacarlo adelante? ¿Con qué acciones mantienes motivada
a esta generación?
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